Islamabad, Tardías, pero intensas lluvias monzónicas
causaron decenas de muertos y miles de damnificados en Pakistán y la India,
cuyas instituciones meteorológicas pronosticaron que las precipitaciones
proseguirán.
En los territorios pakistaníes del norte y el este, los
torrentes causaron la muerte al menos a 30 personas y destruyeron cientos de
edificaciones, principalmente viviendas en condiciones precarias.
Más de la mitad de las desgracias se registraron en la
provincia de Khyber-Pakhtunkhwa y en la porción pakistaní de Cachemira, donde
además numerosas cabezas de ganado fueron arrastradas por las crecidas. En esos
territorios, varios distritos se declararon en estado de emergencia.
La Autoridad Nacional de Manejo de Desastres advirtió que
la cifra de muertos en el país pudiera aumentar en tanto los equipos de rescate
aún no han hecho una evaluación completa de los daños.
El primer ministro Raja Pervez Ashraf ordenó tomar
medidas inmediatas para evitar una mayor destrucción y movilizar los recursos
necesarios hacia las zonas más afectadas.
En la India, entretanto, el territorio más afectado es el
estado de Rajastán, donde las lluvias más intensas desde 1981 han provocado una
veintena de muertes, decenas de lesionados y la destrucción total o parcial de
unas 200 viviendas.
Solo en la capital estadual, Jaipur, un popular destino
turístico, han sido evacuados más de dos mil pobladores, la mayoría residentes
en barrios marginales.
Las lluvias en la región comenzaron hace cuatro días y
según el Departamento de Meteorología de la India persistirán este fin de
semana.